Estas son algunas de las mejores frases:
En un momento en que nuestro barco parecía ir a la deriva, el Premio Nobel fue el viento de popa que nos impulsó para llegar a nuestro destino: ¡el puerto de la paz.
Con este acuerdo podemos decir que América –desde Alaska hasta la Patagonia– es una zona de paz.
Si la guerra puede terminar en un hemisferio, ¿por qué no pueden algún día los dos hemisferios estar libres de ella? Tal vez, hoy más que nunca, podemos atrevernos a imaginar un mundo sin guerra. Lo imposible puede ser posible.
Es insensato pensar que el fin de los conflictos sea el exterminio de la contraparte.
Las víctimas quieren la justicia, pero más que nada quieren la verdad, y quieren –con espíritu generoso– que no haya nuevas víctimas que sufran lo que ellas sufrieron.
Mientras muchos que no han sufrido en carne propia el conflicto se resisten a la paz, son las víctimas las más dispuestas a perdonar, a reconciliarse, y a enfrentar el futuro con un corazón libre de odio.
Señoras y señores: Hay una guerra menos en el mundo, ¡y es la de Colombia!